(† 3441 S.E.) El rey de los Elfos de Lindon, al nacer lo llamaron Ereinion, Q. «Vástago de Reyes», porque su padre era Fingon, el supremo Señor de los Noldor. Más tarde fue conocido por el sobrenombre de Gil-galad (S. "Estrella Radiante») a causa de su armadura que, cubierta de plata y adornada con blancas estrellas, se veía de lejos.

De niño, su padre lo envió a las Falas para alejarlo de los peligros en Hithlum. Desde allí huyó con Círdan a la Isla Balar, cuando Morgoth conquistó los puertos. Tras la muerte de Turgon se convirtió en el Supremo Señor de los Noldor que pemianecieron en la Tierra Media después del hundimiento de Beleriand. Descubrió a tiempo que un seguidor de Morgoth estaba consiguiendo poder de nuevo en Oriente y pidió ayuda a los Númenóreanos. Cuando Sauron atacó Eregion, envió un ejército mandado por Elrond contra él. Éste, sin embargo, llegó tarde y no tuvo suficiente fuerza para reconquistar Eregion.

En los años siguientes (1697-1700 S.E.), Gil-galad pudo defender con mucho esfuerzo los pasos sobre el río Lhûn. La intervención de las fuerzas de ataque Númenóreanas al mando del almirante (y posterior rey) Ciryatur decidió finalmente la guerra a favor de Gil-galad. Al cabo de poco tiempo, los Númenóreanos comenzaron a exigir el pago de tributos en la Tierra Media y su amistad con los Elfos se enfrió. Celebrimbor le entregó los dos Anillos Élficos, Narya y Vilya, poco antes de su muerte; más tarde él se los pasó a Círdan y a Elrond.

Cuando Sauron volvió a hacerse fuerte después de su regresó de Númenor, Gil-galad se unió a su amigo Elendil en lo que se llamó la Última Alianza entre Elfos y Hombres. Reunieron una hueste fuerte y espléndida en Arnor y la llevaron por los Pasos de la Montañas Nubladas, descendiendo por el Anduin hasta Dagorlad. Allí tuvo lugar la Batalla (3434 S.E.). Dicen que lucharon todas las criaturas de la Tierra Media, incluso los pájaros y animales, y que lo hicieron a ambos lados; sólo los Elfos estaban unidos y seguían a Gil-galad, aunque también tuvo dificultades con la disciplina en combate de los Elfos Silvanos. El ejército de los Aliados venció, pero Gil-galad y Elendil cayeron en las laderas del Monte Orodruin cuando derrumbaron juntos a Sauron, después de más de siete años de sitio a Barad-dûr.

En la Tercera Edad, las hazañas de Gil-galad se cantaban en una balada élfica. Tres estrofas de la misma han llegado a nosotros en una traducción de Bilbo Bolsón. Gil-galad no tuvo descendientes y muy pocos elfos permanecieron con Círdan en Lindon tras su muerte.

«Gil-galad era un rey de los Elfos;
los trovadores lamentaban la suerte
del último reino libre y hermoso
entre las montañas y el océano.
La espada del rey era larga, y afilada la lanza,
y el casco brillante se veía de lejos;
y en el escudo de plata se reflejaban
los astros innumerables de los campos del cielo.
Pero hace mucho tiempo se alejó a caballo,
y nadie sabe dónde habita ahora;
la estrella de Gil-galad cayó en las tinieblas
de Mordor, el país de las sombras».

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Ver actor de las adaptaciones cinematográficas.